CIUDAD OBREGÓN.- La edición número 31 de la Misión Juvenil en la Sierra Tarahumara estará dedicada al padre Rogelio López.

Por ser uno de los fundadores de la misión y quien durante tres décadas ofició una misa especial para los misioneros previo a su partida, se decidió dedicar el trabajo que realizarán los jóvenes en 46 pueblos.

El misionero Francisco Guerrero Castro mencionó que el padre, quien falleció en septiembre pasado, por primera vez no estará físicamente para despedirlos sin embargo saben que cuentan con su bendición para que todas las actividades se realicen sin contratiempos mayores durante Semana Santa. 

Al día de hoy suman 170 jóvenes inscritos para ser misioneros, quienes ya trabajan en la reunión de víveres para la comunidad que les fue asignada. 

“Se necesita alimento no perecedero, dulces, por lo que si un joven misionero toca a su puerta sepan que no pide para él sino para una buena causa”, comentó. 

Además de llevar víveres a comunidades que en la mayoría de los casos no cuentan con servicios básicos, los misioneros realizan servicio social y evangelización con los habitantes.