CIUDAD DE MÉXICO.- Para el Gobierno de Estados Unidos, la decisión de mandar a 2025 la prohibición de compras de maíz genéticamente modificado por parte de México e incluso ajustar esa política fue una respuesta satisfactoria, aseguró Víctor Villalobos, titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).
Así, a mediados de enero del próximo año, México enviará a Estados Unidos un documento para detallar la resolución final.
"Lo que se acordó en esta reunión es que se amplía el periodo de importación (de maíz transgénico) hasta enero de 2025, y que después de ese periodo si no logramos la autosuficiencia se revisará lo que será eventualmente un nuevo decreto presidencial.
"Nuestras contrapartes de Estados Unidos han considerado satisfactoria esta respuesta, entregamos un documento para su discusión posiblemente en la segunda mitad de enero, donde definitivamente este tema quedará resuelto", dijo Villalobos.
Afirmó que tras la reunión del viernes pasado en Washington con su homólogo estadounidense, Tom Vilsack, y Katherine Tai, la representante comercial de Estados Unidos, se definió que si bien el maíz transgénico no puede ser para consumo humano, también se reconoció la dependencia de este grano.
México es deficitario en la producción de maíz dirigido a la agroindustria, que emplea almidón y grano para forraje, por lo que se importan en promedio cada año una 16 millones de toneladas, por lo que se busca disminuir la dependencia con producción nacional, pero sin la posibilidad de sustituirlo por completo, reconoció el titular de la Sader.
Sin embargo, el Secretario de Agricultura insistió en que la actual política de Gobierno va encaminada a contar con una producción de maíz de consumo humano autosuficiente en el País, así como libre de transgénicos.
"La reunión tuvo lugar con el objetivo de anticipar lo que México ha venido considerando como una política instruida por el Presidente (López Obrador), a través de la cual se ha dejado en claro que lo que nosotros vamos a salvaguardar será siempre el consumo humano libre de transgénicos", afirmó Villalobos Arámbula.
Apuestan por una producción natural
Para la Sader, el camino para alcanzar la autosuficiencia alimentaria debe ir de la mano de opciones diferentes al empleo de agroquímicos.
Y aunque no puede erradicarse por completo el uso de sustancias, es necesario impulsar alternativas naturales para incrementar la producción, aseguró Villalobos.
"La necesidad de seguir destinando recursos económicos cada ciclo agrícola para controlar las plagas y enfermedades nos está llevando hacia el incremento de los costos, y el margen de ganancia es muy limitado", comentó el funcionario.
Por ello, la Sader apuesta por alternativas en la producción de maíz, como el empleo de feromonas sintetizadas para atacar las plagas en los cultivos.
Actualmente, la Sader maneja un programa en colaboración de Frances Arnold, Premio Nobel de Química 2018, que por medio de feromonas reduce la incidencia de plaga de gusano cogollero en los cultivos de maíz.
"Ese proyecto piloto ha ido creciendo, hoy día hay 24 mil hectáreas que están siendo atendidas con esta estrategia", detalló el titular de Sader.