CIUDAD DE MÉXICO.- Senadores del PAN y del PRI afirmaron que 'enterrar' la reforma educativa, como plantea la CNTE, sería un retroceso que pondría en riesgo el interés superior de la niñez a una educación de calidad.

El senador Carlos Romero Hicks, quien presidió la Comisión de Educación en la actual Legislatura, consideró que derogar las leyes que integran la reforma es una involución que perjudicará a los alumnos.

El legislador reconoció que, a cinco años de aprobarse, la reforma en la materia no es perfecta, registra pendientes y merece correcciones.

"¿Vamos a regresar a la venta de plazas, a los no concursos, a que el sindicato maneje las decisiones por encima de los alumnos y del interés de carácter educativo? Por supuesto que no. Sería una involución, sería darle la espalda a la niñez mexicana", dijo en entrevista.

Resaltó que existen cinco pendientes en la aplicación de la reforma: primero, aprobar el modelo educativo, que se aplicará el próximo 20 de agosto en el nivel básico y, segundo, avanzar en la democracia y rendición de cuentas del sindicato oficial y el disidente.

Tercero, revisar la Ley General de Educación, la Ley General del Servicio Profesional Docente y la Ley Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación para mejorar la profesionalización de los maestros.

Cuarto, integrar a la reforma educativa la educación superior y, en el quinto rubro, considerar la participación de padres de familia, organizaciones, sindicatos y cooperativas.

Romero Hicks explicó que, a nivel internacional, para que exista una reforma a fondo se necesitan cuatro ingredientes: cambiar el modelo educativo, construir comunidades de aprendizaje en valores y tener una evaluación con consecuencias, la cual debe ser formativa y no punitiva.

En el cuarto aspecto se debe impulsar un círculo virtuoso para los profesores desde su formación inicial, su ingreso, permanencia, reconocimiento y promoción.

El panista criticó que durante este sexenio la CNTE nunca hizo una propuesta específica para modificar las leyes educativas.

"La Coordinadora nunca presentó una iniciativa. No fue una iniciativa ciudadana, fueron discursos dialógicos y consideraciones desde su punto de vista, pero nunca entregaron un texto de una sola redacción", detalló.

Respecto a los acuerdos firmados entre el Gobierno de Chiapas y líderes de la CNTE , Romero Hicks señaló que existe una Constitución, una Ley General del Servicio Profesional Docente, por lo que si firmaron una adjudicación de plazas fuera del concurso son nulas.

Por su parte, el senador priista Jesús Casillas consideró que sería un riesgo entregarle la educación a grupos facciosos.

"El llamado sería a los próximos legisladores para que con mucha responsabilidad revisen la ley y si es para mejorarla adelante, pero si es para cancelarla sería un enorme desacierto.

"Entregarles la educación a grupos facciosos no es lo más prudente. La Secretaría de Educación Pública y el Gobierno federal deben ser los rectores de la educación en este País, en el que se garantice que todos los niños pueden acceder a una educación de calidad", recalcó.

En tanto, la senadora priista Diva Gastélum afirmó que el tema educativo no debe estar sujeto a eventualidades.

Señaló que aprobar la reforma educativa costó mucho esfuerzo y que los integrantes de la Coordinadora no son los únicos profesores del País.

"Regresar a los maestros a las aulas no fue fácil y lograr que los recursos se canalizaran a una educación de calidad va caminando. Sería un retroceso muy importante, pero vamos a esperar.

"No es suficiente la victoria del Presidente electo. Creo que el tema educativo es un tema que debe estar blindado y no sujeto a eventualidades", expresó.

La priista sostuvo que la reforma educativa no debe ser una moneda de cambio para calmar a grupos políticos.