VILLA JUÁREZ.- Ser capacitados para el manejo de situaciones de riesgo, solicitan pescadores de la Bahía del Tóbari al Gobierno del Estado, preocupados por el tiburón blanco que aún acecha la zona y que recientemente cobró la vida de una persona.
El sector pesquero manifestó que no cuentan con un protocolo para proceder en estos casos y que impida perder más vidas.
Poco más de 120 buzos dejaron de trabajar en las aguas del mar de Cortés, frente a esta productiva bahía, al no contar con capacitación para prevenir un posible ataque, mucho menor tener entre su equipo, los brazaletes que emiten ondas magnéticas y alejan a los escualos.
“Queremos que nos apoyen con asesoría, con cualquier tipo de capacitación para los pescadores que se dedican al callo de hacha, al redondo. El problema sigue latente y tener amabilidad de que el Gobierno nos apoye con los brazaletes para que las personas se sientan seguras”, declaró Florentino Jusacamea, alcalde de Benito Juárez.
El profesor-investigador de la Universidad de Sonora, Alf Meling, dijo que, aunque se desconocen las causas del ataque, podría tener relación con los cambios de temperatura en las aguas marinas, que atrae a especies no comunes en la zona.
“Como ya hubo un ataque o una advertencia de que hay un alimento fácil en esa zona, ya sea Yavaros o el Tóbari, pues es como un aviso de los tiburones de que hay comida fácil. Yo estoy sugiriendo que debe de haber un protocolo de los buzos para este tipo de situaciones”, comentó Alf Meling
El tiburón, que según testigos mide alrededor de 6 metros de largo, mantienen temporalmente suspendida la extracción de callo de hacha y otro tipo de moluscos de temporada en la zona, ya que requieren buceo para su captura.