Vaya despropósito el que plantea la alianza PAN PRI PRD, la petición de que decline Jorge Álvarez Maynez por Xóchitl Gálvez es una muestra de la desesperación que se cargan por haber elegido una candidata que no está a la altura de lo que se exige, un gran error de cálculo al pensar que la diatriba la iba a catapultar y que le alcanzaría para ser una candidata competitiva.

Los números volverán a ser una pesada losa para la alianza del PAN PRI PRD la noche del 2 de junio, la propuesta de “Alito” Moreno no es para salvar a su partido o a la alianza, mucho menos un gesto noble por el País, es solo para tratar de hundir a Movimiento Ciudadano y ponerlo a la altura de ellos.

Si bien la forma de gobernar del presidente López Obrador es vil y canallesca pues exacerba las diferencias de los mexicanos para generar encono y así lograr que su movimiento se consolide, no es con el regreso de Marko Cortez, “Alito” o Zambrano como México puede avanzar, por el contrario, esos personajes ven al País como un botín.

A estas alturas del proceso electoral, con las campañas llegando a la otra orilla, nadie con dos dedos de frente desconoce los resultados que habrán de presentarse el 2 de junio. Otra vez Morena y sus partidos advenedizos van a tener un extraordinario resultado. Queda claro después de estos meses que el proyecto de MC no es en esta elección, su mira está puesta en los próximos años, quienes habrán de hacer un amargo corte de caja son PAN, PRI y tal vez el PRD desparezca.

Con las tendencias más que claras y definidas lo importante es qué pasará después del 2 de junio, cómo habrán de conformarse las Cámaras y cómo se llega, no será lo mismo el reset post electoral de MC que el de PAN PRI PRD, hasta en la derrota las formas importan.

Post debate

A Javier Lamarque no le fue bien en el debate del sábado anterior. Quedó a deber el morenista pues dijo días antes que bailaría “al son que le toquen”, Armando Alcalá hizo señalamientos que no fueron respondidos con la contundencia que ameritaban. Los debates son para ganarse en el atril, no en conferencias de prensa posteriores.

Se vio una sobre reacción por parte del equipo cercano de Javier Lamarque para que se aclararan algunos puntos, pero el debate ya formaba parte del pasado. Con la diferencia amplia que hay en las preferencias electorales a favor del candidato de Sigamos Haciendo Historia, un debate no va a influir en su resultado. 

No hay que exagerar, ni haberlo ganado es tan bueno para Alcalá pues no se reflejará en las urnas, ni haberlo perdido es tan malo para Lamarque ya que se encamina al triunfo el 2 de junio.