Los 50 compromisos que presentó Javier Lamarque desde campaña y que refrendó el 16 de septiembre cuando asumió por otro periodo en la presidencia municipal no están escritos en piedra, por el bien de los cajemenses debieran modificarse.

Empecemos por lo bueno. Debemos reconocer la excelente iniciativa de atender de forma seria, institucional y profesional la salud mental y el entorno emocional de las y los policías municipales, una medida plausible que por primera vez reconoce la dimensión del problema, cuidar a quienes en su mayoría nos cuidan es una manera de trabajar por la sociedad y desde espacio vaya nuestro reconocimiento.

Pero, la insistencia en el corredor Circuito Universitario es un proyecto que nació en alguna oficina que le urge dispersar recursos, en la práctica está destinado al fracaso, si fuéramos mal pensados diríamos que, igual que en el proyecto del nuevo estadio en 2014, buscan dar plusvalía a algunos terrenos.

Promoción 

El cambio anunciado por Javier Lamarque en su equipo cercano no deja dudas de su intención de buscar la gubernatura de Sonora, el lunes 9 presentó en conferencia de prensa a quien se desempeña desde esta semana como director de Comunicación Social, René Lucero sustituye a Joaquín Galaz.

El trabajo del ex director fue bueno en lo inherente a sus funciones, pero las características y trayectoria de René Lucero, se supone, habrán de colocar a Javier Lamarque en los temas de conversación estatal, ya hasta hay pautas de difusión del gobierno municipal en medios estatales.

En 2004 Andrés Manuel López a la pregunta si buscaría la Presidencia de la República respondió que lo dieran por muerto y en las tres elecciones subsecuentes apareció en la boleta electoral, Lamarque Cano fue presuroso a aclarar que no es su objetivo buscar la gubernatura y que nada lo va a distraer de su función de gobernar Cajeme.

Por supuesto que casi todos los mexicanos tenemos el derecho a votar y ser votados, no creo que haya alguien medianamente informado que se oponga a la intención de Javier Lamarque de continuar su carrera política, será muy interesante lo que el destino le depare al alcalde de Cajeme en esta intención. 

Su cercanía (amistad dice él), con Claudia Sheinbaum es un aliciente para haberse planteado el objetivo de, junto a media docena de morenistas, buscar la gubernatura de tres años de 2027. Lo que sea que venga habrá de revestir un interés especial.

Más respeto

A Javier Lamarque le gusta mucho hacerse acompañar por el delegado de Gobernación en Sonora, el tabasqueño Máximo Moscoso, le encanta que recree y les platique a los presentes la cercanía del alcalde con el presidente López Obrador, es divertido escuchar cómo va brincando de un tema a otro sin ton ni son el funcionario federal, pero tener el desatino de llamarle a Luis Castro Acosta “el chico que nos facilitó la información” es una falta de respeto. 

No han pasado ni tres meses del homicidio del ex director del Oomapasc (del que por cierto pocos creen en la teoría del asalto) y en recuerdo a su persona y al intenso trabajo que hizo por el proyecto político que hoy gobierna deberían tenerle más respeto.